miércoles, abril 20, 2005

Habemus Papam



Finalmente Joseph Ratzinger fue el elegido y ya tenemos nuevo Papa: Benedicto XVI (no Gregorio como dijo ayer el portavoz de la Conferencia Episcopal Española). No era mi favorito en ningún sentido, pero qué se le va a hacer.

Lo malo es que, siguiendo las profecías de San Malaquías, es el penúltimo antes del fin del mundo... y claro, con 78 tacos a punto de cumplir los 79 a pesar de que su cumpleaños fue esta semana (dicho en TeleChingo, ¡qué rápido envejece este hombre!) uno no espera que dure hasta que yo me muera. Y, encima, ayer escuché lo que no quería escuchar, que su predecesor en nombre (Benedicto XV) fue un pacifista.

Sé que mis temores pueden estar infundados, pero yo no tengo los huevos de Pepe Rodríguez, capaz de confirmar que Dios se equivoca. Aunque para ello tenga que inventarse cosas, mentir descaradamente, o demostrar que es un analfabeto.