Cómprate un amigo

Hace poco estuvo mi primo pequeño en casa; para él jugar consiste en montar un escenario (no muy grande) y destruirlo. Literalmente. En ningún momento se plantea la posibilidad de desarrollar una historia en el juego (imaginación 0, inventiva 0, creatividad 0).

Nos quejamos de que pasan muchas horas ante la maquinita o la televisión, que no se hacen amigos como antes... ¿solución? Vivimos en tiempos de tamagochis, videojuegos, robots que hacen de perro, consolas que hacen de perro... así que inventemos el amigo sintético que vea la televisión con ellos. Lo leí en el boletín de VNUNet. Y me permito fusilar el comentario original, porque es genial:

Lo que nos faltaba: un muñeco que ve la televisión contigo y reacciona a lo que aparece en la pantalla. ¿Para qué tener amigos con los que ver la televisión (o mejor, jugar) cuando el niño puede quedarse catatónico con un bicho relleno al lado? Eso digo yo. Se supone que si le regalas a tu hijo, primo, sobrinito o cualquier víctima menor de edad, este "Peluche y DVD Sincronizados Para El Desarrollo Infantil" (que también recibe el nombre de "Oveja Infernal") la próxima vez que vea el vídeo incluído reaccionará con risas, cantando o encendiendo las luces ante las imágenes y sonidos que salgan de la televisión. La teoría es que así el niño se desarrollará mejor. La práctica es que probablemente se convertirá en un psicópata que asesinará a cualquier persona con un abrigo de cabra cuando sea mayor. O la alternativa más plausible: terminará siendo igual de borrego que el sujeto que se atreva a regalar semejante artilugio

¿Alguien se extraña de que los monos sean más razonadores?

Por cierto, se recomiendo también para futboleros solitarios, culebroneros solitarios... en fin, gente solitaria en sus gustos televisivos. Si os atrevéis, claro.

PD. Y veo ahora que el blog éste es de VNUNet... qué cosas...