viernes, septiembre 02, 2005

La política es como la suerte

Ambas son como una mujer de mala vida, se van con el mejor postor. Voy a realizar un simple ejercicio de demagogia. Adivinen quién dice cada frase:
Frase 1: "Le vuelvo a insistir: no haga parches, tome medidas de fondo, dé respuesta a lo que es un clamor de la ciudadanía, no castigue sólo los bolsillos de los ciudadanos como consecuencia de la subida del crudo. En nombre de esas reivindicaciones justas, de las que hay hoy y de las que van a venir mañana, le exijo, le reclamo que baje los impuestos de los hidrocarburos (entero)

Frase 2: "Rebajar la fiscalidad nacional no es la solución para atacar el problema", subraya el Gobierno, que ofrece más argumentos para rechazar una reducción en los impuestos de las gasolinas, tal y como se ha sugerido desde determinados sectores económicos (entero)

No ha sido el único caso, ya que con la LSSI vimos un ejercicio similar. No cambia nada; los gobernantes siguen pasando olímpicamente del pueblo.

La inspiración me vino de un post de Punto y Aparte que acusa de demagógico un titular que tacha de sablazo que nos suban el tabaco, el alcohol, la luz y la gasolina (¿más?) en lugar de dejar de derrochar nuestro dinero en tonterías.

Actualización:
Si antes hablo de gastar el dinero en tonterías... y eso por no meterme con el cine