El efecto mar Muerto
En él se viene a decir que las empresas de tecnología son enormes dinosaurios a los que la innovación tecnológica, irónicamente, causa pavor; cómo se premia la mediocridad para evitar que te muevan del sillón y el trabajo se realiza a base de pagar un pastón no al que vale y es fiel a la empresa, sino al mercenario (igualico, igualico que pasa con las telecos y sus regalos a nuevos clientes) que llega, hace su trabajo y con la misma se va, dejando pringados a todos los que se quedan...
Bellz ya puso un par de entradas sobre un tema parecido (El milagro de los recursos y El riesgo de convertirse en una factoría de software sin serlo), pero es algo que no me cansaré de repetir: Hacen falta personas en la "zona de poder" que no le tengan miedo a la tecnología, que estén más o menos al día o al menos tengan los huevos de confiar en sus programadores. Todo lo demás es literatura barata y sólo sirve para alargar el tiempo que falta para perder el tren. Y en un momento donde la tecnología cambia a velocidad de vértigo, el tren no vuelve, vamos de victoria en victoria hasta la derrota final.
Etiquetas: programación, trabajo